La fotografía de la viejecita de cabello de nieve y rostro angelical se contradice con la descripción que hizo de ella un fiscal norteamericano que, en 1902, la tildó de ser “la mujer más peligrosa en Estados Unidos”. Este letrado de los patrones mineros que prohibían las reuniones sindicales, remiten a la vida plena de jornadas heroicas y trágicas que transformaron a la maestra irlandesa Mary Harris en Mother Jones. Mary nació en 1830, en un hogar de militantes irlandeses; conoció el exilio muy joven, cuando su familia huyó al Canadá, donde obtuvo su título de maestra. Ya en Estados Unidos, después de trabajar unos pocos meses, renuncia al estricto convento donde dictaba clases, porque “prefería zurcir que mandonear a niños pequeños” y se mudó a Chicago, donde trabajó como costurera. En 1861 se casó con George Jones, un obrero fundidor, con quien tuvo cuatro hijos. Junto a su compañero dará sus primeros pasos en la lucha proletaria. Pero seis años después, su marido y sus